TRASH THE DRESS
¿Tirarías el vestido de novia a la basura ?
La primera vez que me pidieron una sesión Trash the Dress, pensé… ¡Que tontería! ¿A quién se le ocurre destrozar su vestido de novia?
Cuando le comenté a Lili, le pareció la mejor idea del mundo y comenzó a planear su propia sesión. Googleó, pinteresteó y se emocionó... yo no entendía nada, hasta que me dijo: “Nunca me volveré a poner mi vestido, está guardado en el clóset, me costó tanto trabajo e ilusión elegirlo… qué tristeza que sólo se quede ahí, está padre tener una sesión más relajada, ya sin la presión de la boda… además, un Trash the Dress no necesariamente significa tirar tu vestido a la basura”
Y no, me sorprendió descubrir que los Trash the Dress son muy divertidos, no tienen límites; siempre son sesiones más relajadas, ya no existen los nervios de la boda, ni la presión de que todo salga bien, están llenas de buena onda.
Nada que ver con tirar el vestido a la basura, ¿no?